Retomamos esta sección del blog, con un pequeño extracto de la entrevista a este Top Boy del Forest, esperemos que os resulte interesante. Cabe reseñar que la imagen que acompaña el artículo es del propio Boatsy, junto con el autor del libro el más que conocido Cass Pennant.
Boatsy, su nombre real es Gary Clarke, nacido en 1965. Su primer trabajo fue para el ayuntamiento de la ciudad. Actualmente divorciado, fue a su primer partido del Forest, cuando jugó contra Norwich en 1974.
¿Cual ha sido la mayor pelea o incidente en el que tu grupo se ha visto envuelto?
Uno de mis partidos favoritos por simplemente violencia, fue contra el Anderlecht, fuera de casa, en 1984. Ya fue una locura desde el primer dia, al coger el ferry en Dover. Había Mancunians en el mismo barco que iban a Italia para jugar contra la Juventus. Era Sabado noche, y había en torno a cuarenta de ellos, la mayoría Cockney Reds. Solo estábamos 8 de los nuestros, pero tampoco importó mucho. El barco llego con 20 minutos de adelanto a Ostend, con los antidisturbios esperando que desembarcasemos. Cogieron a tres de los nuestros y en torno a 20 Mancs. Nos jodió esto último, pero no obstante estuvo genial. Este incidente ha sido mencionado en el libro de Bill Bufford “Among the Thugs”, comentando que el ferry tuvo que dar la vuelta a Inglaterra, algo que no fue cierto.
Me soltaron al dia siguiente, culpando a los Mancunians. Durante los siguientes días, grandes cantidades de nuestros chicos fueron llegando a Bruselas. Habíamos oído que su firm era llamada de The O Side Boys o algo asi, así que antes del partido fuimos a dar una vuelta por dónde nos habían dicho que bebían antes del partido. Les corrimos delante de su local. Iban todos con bombers verde mientras los antidisturbios se metían de vez en cuando a separar a los dos grupos.
Después fuimos escoltados a la zona visitante, la cual estaba hasta arriba de gente, con más de cuatro mil de los nuestros, para un espacio tan sumamente pequeño. Así que muchos de nuestros chicos saltaron las vallas y se colocaron detrás de la portería. Tan pronto como nos marcaron, “limpiabamos” su fondo, así por tres veces. Perdimos aquella noche 3-0, y nos eliminaron por un global 3-2 en la eliminatoria. Si has visto la repetición de los goles en televisión, pueden verse que en las gradas se abren grandes huecos cada vez que nos marcaban.
Volví de vuelta a Dover el Jueves por la mañana esperando que saliese en todos los periódicos. Solo nos dedicaron cinco líneas en The Sun. Si aquello lo hubiese hecho Man United, Chelsea o Leeds, habría salido en primera plana. ¡Me jodió la hostia!
Birmingham fuera en la quinta rondad de la FA Cup del 88 también fue una buena: 87 arrestos de titular en uno de los periódicos a nivel nacional.
Middlesbrough fuera, en torno a la temporada 1995/1996 fue un buen viaje: nunca habíamos estado allí hasta entonces como firm. Forest tuvo varias batallas allí en los inicios de los 80. En un desafortunado incidente , uno de sus “lads” murio en una pelea comiéndose uno de nuestro “Top boys” cuatro años por homicidio y varios más encerrados una temporada. Así que decidimos alquilar un bus, con algunos de los mejores de los nuestros. Nos fuimos en Darlington sobre 80 de los nuestros, Boro sabía que estábamos de camino. Allí tomamos el tren, y al llegar a nuestro destino, todo bar cercano a la estación lo vaciábamos y la “madera”, estropeando la que se preveía que iba ser una muy buena. Nos llevaron al campo a la 1. Pero nos dijimos: Boro, estará esperando el tren de vuelta a Darlo; que nos esperarían.
Después del partido nos escoltaron y nos subieron al tren de nuevo camino de Darlo con solamente tres policias a bordo. De todas maneras, en la primera parada de la línea, Thornaby, y allí estaba “una mob” esperando en el anden. No creo que pensasen que nos ibamos a bajar. Salimos fuera con tres maderos corriendo en circulos intentando pegar a la gente. Los corrimos tres veces, bajo un viaducto del ferrocarril. Había cuerpos por todos lados. Duró en torno a diez minutos, hasta que los antidisturbios llegaron y todo el mundo se escaqueo hacia el tren, como nada hubiese pasado. Fue divertido, pero nunca mencionado en su libro, tengo que reconocer que les tengo el máximo respeto a su “primera línea”.
